Me
cautivó una voz
de
púrpura inviolable
fecunda
de resueltos aromas.
Me
quitó el aliento
una
risa seductora
apaciguando
dolores
que
siguen siendo míos/
¿Que
conjuro te preserva
al
paso largo del tiempo?
¿Que
magia celosa oculta
tu
candidez que no pierde brillo?
Te
elevas en la torre alta del castillo
con
vuelo de iluminada mariposa/
Saltas
a la hora de la flor hermosa
e
incitas mis sentidos
con
tu desvelo
como
las cuerdas de una guitarra
sin
caja ni velo
que
la música serena adora/
La
armonía de tu lira
desliza
mi sueño desnudo/
Sueño
orquestado,
conquistada
utopía
que
tu sentir de lana
y
mano me ha entregado/
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