Hoy te
escribo un breve verso
Con la
pluma de estreno
De tu
regalo de enamorada.
La
pusiste en mi mano frágil
Con tus
dedos tenues,
tu beso
de brisa y aliento
Me
sopla la gloria del trigo dorado, y
me
enciendo con tu mano
en mi
cabeza.
Mano de
leche cálida,
-tibia
como el seno que amamanta-
mano
que posa mi corona como elegido.
¡ Que magno mi destino ¡
Si he
sido tu elección entre la manada rondante,
solo
por hacer caer tu vestido enamorado,
con mi
mirada de sueño y amor laborioso.
De lo
que me has entregado
faltan
los versos paridos,
el
poema nonato y tu imagen
reflejada
en poesia.
Desecha
el tiempo de la pena
en la
fuente de las corolas.
Tengo
ferviente la pluma
para la
calidez del otoño
y del
momento presente
el desvestirte
en el ahora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario