Me gustas
cuando estás colmada de palabras
y en cada
silaba que sueltas florece una caricia que me toca,
como una
corola amplia o un rosal abierto.
Es la seda
de tu voz la condescendencia armónica
en las
teclas de un piano que desde el jardín entra notas
que
palpitan. Tus dedos acuosos descorren el velo en las
turquesas prístinas,
Tu mano toca
sílabas que tintinean, copas sobrevoladas
por abejas
ambarinas.
Eres bóveda
que declina de las nubes hasta mis manos
y te
enroscas capsula celeste, al aire sueltas sonatinas
y madrigales
que a mi oído llegan como lene pluma de ventisca.
Tan sencilla
eres, hoja que arrastra la brisa en otoños derramados.
Me place oír
tu melódica campanilla con sonar de cascadas amatistas.
Te
distiendes al alfeizar cual una planicie de oro verde,
con puntual
precisión tu palabra expresa ternura,
en la hora
unísona cuando repican trabajosas campanas.
Bajo el
rigor de rociadas lunas opalinas la noche en sigilo alambica
olor salvaje
que suelta la madreselva florida.
Es tu gola
húmeda linde de expansivos regueros añiles,
en la noche
apagada despiertas, grácil campánula,
resonantes
compases de mixtura.
Tonos
parduscos y azules del anochecer en suaves flautas pastoriles.
Curva sutil,
desnudez rosácea, cuando nace el día te hundes
en subterráneas raíces
veraniegas, seduciendo mis laberintos violáceos,
delicia
sensitiva, colmado el espacio de luces.
Llama
simple, como un anillo en la noche iluminada, callada constelación. Tu
palabra es la estela de un cometa satinado,
tan cercana
y tersa como la piel accesible de tus manos.
@2017 - de mi libro JUNTO A LOS LAGOS - ED. DUNKEN- FERIA DEL LIBRO -
BUENOS AIRES - ARGENTINA
Hecho el Depósito según la ley 11-723- registro de autores.
A publicarse en Julio 2017
No hay comentarios:
Publicar un comentario